Feliz Navidad
A lo largo de los siglos los castellanos hemos dejado muchas cosas por el camino. Entre ellas y quizá la más importante, la Fe. Esa Fe que era el combustible de todo un pueblo imparable. Esa Fe que era la energía para levantar las cosechas de los campos. Esa Fe que era la munición para vencer en todas las batallas. Estamos en Navidad. Para los que no creen, es una felicidad impuesta y sin motivo. Para los que sí creemos, es la alegría de que ese Niño que es Dios, viene a alumbrar nuestra oscuridad. Así sentían estas Fiestas nuestros antepasados y así llegaron a ser un pueblo grande, fuerte y unido. Esa grandeza y fortaleza es la que esperamos tantos hoy. Para redimir nuestra tierra y para que Castilla vuelva a esa fortaleza de oro que impera en el centro de su Pendón, recuperemos la Fe. Empezando por la Fe en Dios y en nosotros mismos como pueblo.
Feliz Navidad y Próspero Año 2020.
Tu tierra
Tu tierra es esa en la que has nacido. Es en la que reposan tus ancestros. Es en la que descansarás un día junto a tus padres. La que abrigará amorosamente tus huesos. En la que nacerán nuevas generaciones que mantendrán la memoria colectiva de todos. La que evocarán los niños cuando miren al cielo y cuenten las estrellas. La que huele a jara y tomillo y a sudor y a sangre. ¿De verdad no vale la pena luchar por ella?. Quien no es capaz de embriagarse mínimamente por esa fragancia que desprende el amor de la tierra propia, es difícil que pueda llegar a conmoverse por nada más, salvo la materia o la riqueza. Que será precisamente aquello con lo que no naciste y que perderás tras la llegada inexorable de la muerte. En cambio el amor es lo único que podrá portar tu alma en su ascenso más allá de las estrellas.
Fraude
CAPÍTULO III
DE LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS
Artículo 143
1. En el ejercicio del derecho a la autonomía reconocido en el artículo 2 de la Constitución, las provincias limítrofes con características históricas, culturales y económicas comunes, los territorios insulares y las provincias con entidad regional histórica podrán acceder a su autogobierno y constituirse en Comunidades Autónomas con arreglo a lo previsto en este Título y en los respectivos Estatutos.
2. La iniciativa del proceso autonómico corresponde a todas las Diputaciones interesadas o al órgano interinsular correspondiente y a las dos terceras partes de los municipios cuya población represente, al menos, la mayoría del censo electoral de cada provincia o isla. Estos requisitos deberán ser cumplidos en el plazo de seis meses desde el primer acuerdo adoptado al respecto por alguna de las Corporaciones locales interesadas.
3. La iniciativa, en caso de no prosperar, solamente podrá reiterarse pasados cinco años.
Con la vigente Constitución en la mano solamente puedo decir que todos los procesos autómicos en los territorios de raíz castellana fueron un FRAUDE. Que todo se hizo a espaldas del pueblo y sin recurrir a su aprobación vía referéndum. Y que la marginación y el silencio contra el pueblo castellano y el pueblo leonés, fue un hecho deliberado para tranquilizar y privilegiar a los mismos nacionalistas periféricos, que hoy pretenden la secesión, alardeando de un victimismo cínico e hipócrita.
¡Viva Castilla!